Por: Alejandro Pacheco
El gusano cogollero (Spodoptera frugiperda) es una especie nativa de occidente con amplia distribución geográfica, desde Argentina y Chile, hasta el sur de Estados Unidos; aunque actualmente ha comenzado a ser de gran importancia por los daños causados en el sur de África.
En México se estima que el 70% de los cultivos de maíz tienen presencia de este amiguito y puede acabar hasta con 50% de total sembrado.
CABI publicó un documento en 2017 donde se menciona que podría ocasionar pérdidas en maíz de hasta 6 mil millones de dólares por año en 12 países de África de no hacer ningún control. Esta plaga tiene el potencial de causar pérdidas en el rendimiento de 8.3 a 20.6 millones de toneladas por año y en las próximas temporadas, se espera que se disperse en la zona subsahariana.
Su nombre es dado por los daños que ocasiona en el cogollo de la planta en todos los estadios larvarios, generándose pérdida de área foliar; también es conocido como oruga militar tardía, no solamente por su color que pareciera un camuflaje de batallón militar, sino también, debido a que, ante la escasez de alimento, las larvas se trasladan en masa a otros cultivos como un regimiento en busca de nuevas provisiones.
El gusano cogollero es causante de pérdidas económicas considerables en varios cultivos importantes como maíz, sorgo, arroz, algodón, alfalfa, pastos, entre otros. Pero su “bunker” favorito es el maíz, al que ataca en todas las etapas de crecimiento de la planta, dichos daños pueden provocar su destrucción completa.
Como todo buen militar, posee diferentes habilidades de sobrevivencia, actuando de dos maneras diferente sobre la planta: como cortadora, cuando el barbecho previo se mantuvo sucio y excesos de maleza; cuando el cultivo se encuentra emergido, tiene preferencia por el cogollo de maíz.
¡Creímos que habíamos ganado la guerra, pero solo ganamos la batalla!
Como en la guerra, si un soldado no muere, podrá regresar a la batalla tiempo después con una mayor cantidad de aliados, listos para luchar contra algo que ya conocen; lo mismo ha pasado con el Gusano Cogollero.
Múltiples han sido los intentos de controlarlo, desarrollando mayor armamento bélico en contra de ellos, por lo que en la actualidad se han utilizado métodos como lo son los cultivos genéticamente mejorados, en este caso especialmente, se trata del maíz BT, un maíz que produce proteínas Cry y proteínas Vip, que son toxicas para ciertos insectos, incluidos la oruga militar.
Pero cuando creímos que habíamos superado al enemigo, al cabo de unos años regresaron más fuertes que nunca.
De acuerdo con información de la FAO, productores comerciales de maíz de la región sudafricana, pusieron en cuestión los beneficios del maíz transgénico cuando, dos años después de su introducción, comenzó a mostrar resistencia al maíz Bt, lo que se puede demostrar con las cifras de perdidas en esta región.
Así también, en estudios realizados por Morillo, F & Notz, A.; de la Sociedad Venezolana de Entomología, se observó que en pruebas in vitro, se presentaron altos niveles de resistencia a los insecticidas lambdacihalotrina y metomil.
Ciclo biológico
El adulto es alado con un tamaño de 32 a 38 cm de extremo a extremo. La hembra coloca hasta 1000 huevos en total durante todo su ciclo reproductivo, tanto en el haz como en el envés de la hoja en grupos de varios individuos. Las mariposas prefieren ovipositar en las hojas con menor daño ocasionado por larvas de su misma especie. Cuando están por nacer las larvas, los huevos toman una coloración grisácea, al eclosionar la larva puede llegar a alcanzar de 3.5 a 4 cm de longitud, es de color blanco verdoso. Son activas tanto de día como de noche. Empupan en el suelo (apenas enterradas sobre los rastrojos), donde permanecen unos 10 días hasta la emergencia de las mariposas.
¿Cómo saber si el cultivo presenta gusano cogollero?
Algunos de los métodos para poder identificar su presencia, es mediante los signos que se presentan en los cultivos, por ejemplo:
Daños en el cogollo de la planta, generándose pérdida de área foliar.
Rasgaduras desde la orilla de la hoja avanzando hacia el interior, debido a la alimentación de las larvas.
Daños del tallo que se pueden observar mediante cortes en la base.
Daños en la cáscara de la mazorca en la etapa reproductiva de la planta.
Excremento de color marrón-amarillo en verticilos, en las hojas y alrededor de la base de la planta.
Presencia de larvas en los tejidos foliares y masas de las larvas migrando hacia los campos adyacentes.
Control
Las recomendaciones por parte del CESAVEG para tener un control temprano de gusano cogollero son:
Identificar las etapas susceptibles del cultivo en las cuales puede ser dañado por el gusano cogollero; la etapa más crítica es desde la emergencia y hasta los 50 días.
Después de la emergencia realizar muestreos semanales para detectar oportunamente los primeros brotes de la plaga y así disminuir los daños ocasionados por la misma. El muestreo se debe realizar en 5 de oros revisando 20 plantas por sitio de muestreo. De esta manera se podrá detectar a la plaga en sus primeras etapas, es decir huevecillos y larvas pequeñas ya que es cuando su control es más efectivo.
Si al revisar 100 plantas durante el muestreo semanal se han detectado más de 20 plantas con presencia y daño del gusano cogollero es importante que se implementen medidas de control.
Un método muy utilizado actualmente con buenos resultados es el trampeo con feromonas, así también existen diversas alternativas biológicas para el control de este gran pelotón, como el uso de Telenomus Spp y Trichogramma exiguum, que son algunos de los conocidos depredadores naturales. Otra alternativa de la cual existe evidencia de que puede lograr hasta el 90% de efectividad es mediante el uso de Bacillus thuringiensis.
Referencias:
http://maizedoctor.org/es/gusano-cogollero
http://www.inifap-nortecentro.gob.mx/files/biblioteca/ft20109193.pdf
http://sinavef.senasica.gob.mx/ALERTAS/inicio/pages/single.php?noticia=2808