Tu crees que TU quieres un chocolate… en realidad son las bacterias de tu cuerpo las que te lo están pidiendo.
¿Y si te dijera que tu no eres el que toma las decisiones en tu cuerpo? al menos no como tu crees… ¿Existe el Libre Albedrío?
Esta pregunta, que hasta hace poco invitaba a discutir a filósofos o neurobiólogos, ahora abre la puerta a microbiólogos.
Recientemente, la información sobre las bacterias que habitan el cuerpo humano se ha ampliado mucho más que en toda la historia y, gracias a ese esfuerzo, han empezado a aparecer indicios de que la comunicación entre ellas y nosotros es mucho más activa de lo que antes se pensaba. Más aún, es posible que no seamos nosotros quienes tengamos la voz cantante.
Hace pocos años, han surgido trabajos científicos que demuestran que las bacterias del tracto digestivo son capaces de modificar la conducta alimentaria de las personas. Dicho de otro modo, las bacterias inducen los gustos por la comida en las personas de acuerdo a sus necesidades mediante la inyección de sustancias en el sistema nervioso similares a los neurotransmisores.
Gracias a estas investigaciones, ahora sabemos que tener antojo de chocolate muy probablemente se deba a que nuestras bacterias quieren chocolate. Pero incluso se puede ir más allá.
Hay sustancias que nos dan sensaciones de placer. Pero, ¿en realidad la sustancia nos da la sensación de placer, o son las bacterias que nos agradecen proveerles lo que necesitan? Aparentemente, al menos en algunos casos, es lo segundo. En el sentido inverso, la sensación de dolor de la abstinencia, puede deberse a un “castigo” impuesto por las bacterias, que quieren una dieta diferente.
Estos hallazgos, si bien de enorme interés, abren la puerta a un tema mucho más profundo:
¿existe realmente la división entre los seres? ¿o somos todos parte de un mismo ente complejo? Podría ser que la “conciencia colectiva” no fuera sólo una metáfora.
Para saber más, recomendamos:
Comments